23/04/2020
La magia está ahí
Fotografía: Tanairy Castrellón, LCC.

En cada palabra escrita, en cada oración formada, en cada historia contada, la magia sigue presente entre las páginas de ese libro.

 

Recuerdo la primera historia que pude leer sola, sin ayuda de mis padres o de mi maestra.

 

Era 1ro de primaria, tenía la edad de 6 años, y salí emocionada del salón de clases porque hoy había leído sola.

 

El libro de español lecturas, de aquellos años (2002), estaba conformado de 39 diferentes historias, cada una con más palabras que el anterior, y para una niña que recién descubría esa habilidad, cada historia me motivaba más.

 

“Paco el Chato”, no constaba más de 5 páginas, pero para mí, que iba iniciando perfeccionando mi capacidad de lectura, eran demasiadas.

 

Saliendo de clases, recuerdo que espere a la hora de la comida para leerles a mis padres, como también recién tenía un hermanito, le leía a él, aunque no me llegará a comprender.

 

Conforme fui creciendo, mi gusto por la lectura fue incrementando, aunque, no negaré, que existían ocasiones en las que me desesperaba o me fastidiaba tener que leer algo por “obligación”.

 

La lectura es un hábito que muchos han perdido u olvidado, tal vez sea por culpa de la era digital en la que vivimos, o tal vez no, pero nunca es tarde para comenzar con este hábito positivo.

 

Leer nos ayuda a conocer, descubrir, viajar, imaginar, crear, creer, pero sobre todo, nos permite aprender cosas nuevas.

 

Siempre es grato volver a agarrar un libro, porque la magia está ahí.

 

Lo vi cuándo fue el turno de mis hermanos de descubrir la creación de las historias en las páginas de los libros.

 

Realmente la magia nunca se va, y en este 23 de abril, te invito a que vuelvas a creer en ella.

 

Busca tu libro favorito, tal vez este entre tus viejas pertenencias o en el estante de libros que tienen en tu casa, o busca un libro de tu interés, ya sea en formato PDF o físico.

 

Lo importante aquí es seguir creyendo en la magia de la lectura.